Por: Carlos Urbina

A principios de 2014, la DGi indicó a un contribuyente que la exoneración dada por la ley 30 de 2006 debe ser desarrollada por una ley formal agregando que no es una exoneración expresa. La ley 30 regula la educación privada en el país y en su artículo 43 parece conceder una exoneración del Impuesto a la Renta a las universidades privadas.

La pregunta del contribuyente se dio porque decía ser una universidad que operaba como fundación de interés privado. Añadía el contribuyente que los ingresos de la fundación se usaban para sus fines educativos. Por esta razón preguntaba la universidad si necesitaba o no otra autorización para considerar exentos los ingresos que recibía.

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